miércoles, 8 de mayo de 2013

Misioneros Claretianos


Me costó aprender que ustedes son:
Misioneros, llamados a ir donde hay necesidad,
Claretianos, porque llevan el carisma del Padre Claret,
Que son únicos,
por su forma de ser, sus atenciones y sonrisas.

Primero conocí al más amoroso,
Que me hacía sentir en casa,
Aunque fuera una extraña,
Y de otra religión,
Para él no había diferencias,
Era mi amigo, mi hermano….P. Stalin

El segundo claretiano,
Es mi querido P. Jorge, mi mentor,
La primera conversación fue toda una charla,
Llena de interrogantes,
Sí que me tuvo paciencia,
Y aquí me tienen regresé a Casa,
Regresé a la Iglesia Católica.

Luego conocí al tercer claretiano,
P. Ricardo, más directo que él… nadie,
Me ayudó a moldear mi carácter,
Y tomar las decisiones correctas
En el momento correcto.

Luego, conocí al P. Benito,
Mi Jefe…
Lleno de sonrisas,
Preocupado siempre por sus trabajadores,
Con unas homilías excepcionales,
Que te dejan siempre a la expectativa,
Curioso como un niño, feliz como un niño,
Simplemente ... ¡único!

El siguiente claretiano, fue el P. Valero,
Siempre en su bicicleta, con sus niños de Pando,
Preocupado por sus víveres,
De voz calmada y de ánimo pronto.

No puedo dejar mencionar
A mi querido P. Paquito,
Con sus largas charlas de política, de fútbol
Y temas diversos,
siempre tiene de que charlar,
Con su sonrisa inmensa que te transmite alegría.

Gracias infinitas al
P. Manuel que me dio
y me sigue dando la oportunidad
De llevar mi testimonio a más gentes.

Mis queridos Claretianos,
Más que nunca estamos con ustedes,
Porque han marcado mi vida
Y mi corazón para siempre.

Con cariño:
Karla Rugel M.

No hay comentarios:

Publicar un comentario